Arturo Pérez-Reverte presentará dentro de muy poco una nueva novela, con un argumento propio de las últimas novelas de William Gibson:
Un encargo editorial pone a Alejandra Varela, especialista en arte urbano, tras la pista de Sniper, un reconocido artista del grafiti, promotor de acciones callejeras al límite de la legalidad —algunas de ellas con resultados fatales— del que casi nadie ha visto jamás el rostro ni conoce el paradero. La búsqueda conducirá a la protagonista de Madrid a Lisboa, y de ahí a Verona y Nápoles en su intento por descifrar cuál es el objetivo al que apunta la mira mortal del cazador solitario.
Con las maniobras mediáticas en torno a la presentación he visto varios retratos de Arturo Pérez-Reverte hechos por Victoria Iglesias.
Suyas fueron también unas fotos de los comienzos del escritor. Creo que no es difícil atisbar la transformación de aquel reportero tímido en el personaje de sus columnas de opinión. Tiene su gracia que mucha gente que lo conoció ya como escritor consagrado confunda al personaje y a la persona.
Victoria Iglesias tiene en su blog otros muchas retrastos de personajes de la cultura y el arte bastante interesantes. Desde Lou Reed a José Hierro.