Me sorprendo a mí mismo al descubrir que este blog nació en septiembre de 2011. Y que en los últimos meses apenas he escrito pero no ha sido una ausencia de más de un año como me imaginaba.
Empecé escribiendo un blog anónimo con el nombre de guerra del Lobo Estepario que mutó en uno donde aparecía mi nombre y mi cara. Pero mientras tanto, fui escribiendo blogs anónimos donde escribía de los temas más variados. Este lo empecé para escribir de cosas culturetas. De cine, series de televisión, literatura, fotografía, poesía, música, arquitectura, etc. Por el camino, como siempre, fueron surgiendo temas inesperados, como la construcción social del gusto. Deformación académica. Y así, mientras le daba vueltas a que cámara compacta comprarme me di cuenta de cómo la fotografía había dejado de mirar al futuro a la hora de diseñar las cámaras digitales para vivir en una permanente celebración de la nostalgia. Basta mencionar mi extraña desazón al encontrar un blog de videojuegos retro llamado «Un Pasado Mejor». La comercialización de la nostalgia se convirtió en un tema recurrente y también esa sensación de que «el futuro ya no es lo que era». Luego fui introduciendo otros, tocando temas de política, medios de comunicación y tecnología. Fui acumulando enlaces y más enlaces para escribir aquí, pero nunca encontré el tiempo o las ganas para escribir aquí.
Ahora, volvemos a vivir «tiempos interesantes» en España. Tenemos un nuevo gobierno débil sin margen para desarrollar su agenda económica, así que anticipamos que se dedicará a tomar medidas en el terreno de lo simbólico e identitario. Carlos Prieto habla de la «guerra cultural que viene». Y mientras tanto, «algo» está pasando en YouTube con la aparición de canales como los de Un Tío Blanco Hetero, Anima y Leyre Kyal. Así que escribiré de los temas de siempre, pero abriré nuevos caminos.